Este objetivo busca “poner fin al hambre, lograr la seguridad alimentaria y la mejora de la nutrición y promover la agricultura sostenible”. Para este objetivo se tiene en cuenta que el sector agrícola puede ayudar a generar soluciones importantes para la eliminación del hambre y la pobreza; proporcionando comida nutritiva y generando ingresos. Entre la principales metas de este objetivo están: asegurar acceso a todas las personas a una alimentación sana y nutritiva, duplicar la productividad agrícola, asegurar la sostenibilidad de los sistemas de producción de alimentos y aumentar las inversiones para el desarrollo rural (ONU, 2015).